El ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, fue convocado ayer a la Legislatura para que explique por qué el gobernador Antonio Bonfatti designó en diciembre de 2011 como jefe de Policía de la provincia al comisario general, Hugo Tognoli, hoy preso en una causa que investiga el narcotráfico. Después de una reunión a puertas cerradas de cuatro horas, los diputados y senadores del PJ se fueron sin esa respuesta. Lamberto se plantó en el relato oficial. Justificó la designación de Bonfatti por los antecedentes de Tognoli. «Tenía un currículum intachable e impecable. Era el mejor. No había ninguna razón para no designarlo», dijo. Y luego ensayó una mejor defensa del ex segundo de Tognioli y sucesor en el cargo, Cristian Sola. El ministro confirmó que Sola y el subjefe José Luis Romitti, son investigados a pedido de la justicia por supuesto enriquecimiento ilícito, pero a pesar de eso valoró sus condiciones para comandar una fuerza de 18.000 efectivos. Sola es «el jefe más formado y capacitado que tenemos en Santa Fe. Necesitamos jefes fuertes y con mando para imponer disciplina», los elogió Lamberto.

La autocrítica cero derivó en un diálogo de sordos. El ministro valoró el mano a mano con sus ex colegas. «Fue una reunión prudente. Podemos tener miradas distintas, pero hubo un trato civilizado», se consoló. Antes, había puesto algunas condiciones, entre ellas, hablar sin periodistas de testigos, ni asesores.

Enfrente, los legisladores del PJ hicieron cola para criticarlo. «Nos dejó una sensación de vacío porque no respondió lo que queríamos saber: ¿por qué designaron a Tognioli?», dijo el diputado Héctor Acuña, presidente de la comisión de Seguridad de la Cámara. «Ya llevan cinco años de gobierno y esperábamos respuestas más serias, a la altura de la circunstancias», agregó. Su colega del Frente para la Victoria, Leandro Busatto, coincidió que el resultado del informe Lamberto es «magro». «El ministro no estuvo a la altura de la circunstancias. Dejó más dudas que certezas. Esperábamos respuestas concretas y nos vamos con evasivas».

Rosario/12 pudo reconstruir algunos pasajes de la reunión, a partir del relato de sus protagonistas:

*Las iniciales HT. Lamberto insistió que el gobierno se enteró de las escuchas a Tognioli por la revelación de Página/12, el viernes pasado. Le plantearon entonces que desde marzo había una causa judicial abierta por el fiscal de Cámara de Rosario, Guillermo Camporini, por un anónimo que recibieron él, el diputado Eduardo Toniolli y el defensor general Gabriel Ganon. «Sí, hay una investigación, que el fiscal Camporini se la pasó al juez y éste le dio intervención a la Dirección de Asuntos Internos. Está en marcha», aceptó el ministro. El diputado Toniolli planteó entonces la «contradicción» entre lo que dijo Bonfatti, que no había ninguna acusación contra el comisario Tognioli y lo que ayer admitió Lamberto, que conocía la causa abierta por Camporini. «El ministro nos dijo que a partir de esa causa se iniciaron varias investigaciones por enriquecimiento ilícito y mencionó una lista de los investigados. Cuando le señalé que eso contradice con lo que había dicho el gobernador hubo una fuerte discusión, y él dijo que la justicia había archivado la investigación por ese anónimo, por lo que se decidió no remover de su cargo a Tognoli». «El gobernador no puede decir que desconocía esa denuncia porque Lamberto sí la conocía», dijo el legislador. Y recordó que uno de los mencionados en la carta era un jefe policial con las iniciales HT.

*El mejor jefe. El ministro dijo que uno de los investigados por Asuntos Internos es el actual jefe de Policía, Cristian Sola. «Es la investigación del patrimonio. Ya viene desde hace un tiempo, cuando era subjefe de Policía. Es una investigación preliminar, donde no basta la denuncia, sino que tiene un patrimonio y no lo puede justificar», dijo Lamberto. Cuando le preguntaron por qué Bonfatti lo había designado al frente de la Policía, a pesar de la denuncias, Lamberto contestó: «Porque las sospechas no son suficientes. Sola es un jefe formado y capacitado, quizás el más formado y capacitado de toda la provincia. La policía tiene dificultades y este tiempo demanda jefes fuertes, que impongan disciplina. No es suficiente decir que tiene patrimonio, lo que hay que determinar es si ese patrimonio se condice con sus ingresos».

El planteo de Lamberto generó una reacción política. «Es inaceptable que Sola sea el jefe de Policía de Santa Fe», retrucó el diputado del PJ, Gerardo Rico. «Si el gobierno mantiene la misma matriz, no va a tener otro resultado que el que ya tuvo», advirtió su colega Héctor Acuña. «Después del episodio Tognoli, que Sola sea el jefe de policía es muy preocupante», completó Leandro Busatto.

*El que se fue. Acuña dijo que Lamberto admitió que no se inició ninguna investigación por lo que dijo el ex ministro Leandro Corti sobre los bolsones de corrupción en la Policía. «Parece mentira, es como si Corti no hubiera sido ministro y como si nada hubiera sucedido. Es grave. Si un ministro se va y dice: hay corrupción policial, va de suyo que hay que llamarlo y preguntarle: ¿dónde está el mapa de la corrupción? Es gravísimo que después de la denuncia de Corti, quien lo sucede en el cargo y el gobierno no haya iniciado ninguna investigación para determinar el mapa de la corrupción policial o cuales son los estamentos de la Policía que están corrompidos», agregó Acuña.

*El que no vino. Los legisladores le habían pedido a Lamberto que vaya con su ex secretario de Seguridad, Marcos Escadillo, pero el ministro llegó con quien lo reemplazó en el cargo, Matías Drivet. «Escajadillo no vino porque ya no es más funcionario del Ministerio de Seguridad. Las preguntas las contesté yo, porque yo soy el ministro y yo daba las instrucciones. Y además, no hay ningún cargo personal ni político contra Escajadillo», se molestó Lamberto. El diputado Busatto no le creyó. «Escajadillo no vino porque debe estar preocupado por las nuevas funciones que tiene en la Casa de Gobierno. Había muchas preguntas para él. El ministro está protegiendo a su amigo», retrucó.

*Asesor y abogado. La última intervención de Busatto fastidió aún más a Lamberto. El diputado del FpV le preguntó si era cierto que el ex ministro de Justicia y Derechos Humanos, Héctor Superti, hoy asesor del gobierno de Bonfatti, era abogado del Banco Macro, por el robo de las cajas de seguridad. «No sé», le contestó Lamberto. «Es lo que se comenta en Tribunales», dijo Busatto. Y después, en el hall de la Legislatura, completó: «Si esto es así, lo menos que debería hacer Superti es renunciar a su cargo de asesor o al poder que le dio el Banco Macro. ¿Un asesor de la provincia que podría llegar a demandar a la provincia?», le preguntron. «Exactamente», contestó Busatto.

 

fuente http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/rosario/10-36169-2012-10-26.html