La Dirección General de Asuntos Internos informó que procedió a detener ayer a cuatro policías, que se desempeñaban en distintas dependencias de nuestra ciudad, y a tres ex uniformados, en el marco de una investigación llevada adelante por la fiscalía de Marcelo Romero, con intervención del juzgado de garantías de Juan Pablo Masi, por presuntos apremios ilegales a un menor.

Los voceros indicaron que los cuatro efectivos policiales, que ya se encontraban sancionados, fueron desafectados del servicio.

En tanto que los tres ex policías habían sido oportunamente exonerados de la fuerza, en el marco de la misma investigación sumarial.

La titular de la Auditoría de Asuntos Internos, Viviana Arcidiácono, indicó que “tenemos todo el respaldo del Ministro Ricardo Casal para ser implacables con quienes manchen el uniforme”.

LA CAUSA

Como se recordará, la denuncia penal, por “torturas, apremios y vejaciones” en perjuicio de un menor de 17 años, había sido presentada por el titular de la Defensoría del Fuero Juvenil local, Julián Axat.

De acuerdo a lo que consta en la presentación, los hechos que se denuncian ocurrieron en 2010 cuando agentes policiales detuvieron al joven por el presunto delito de resistencia a la autoridad.

Por tratarse de un delito que no amerita detención, el menor fue liberado y se presentó inmediatamente en la Defensoría, donde relató los hechos que rodearon su detención y los apremios sufridos.

En ese marco, denunció que un grupo de policías lo detuvo en la casa de un amigo y que lo sacaron a golpes sin motivo alguno.

Afirmó que, tras recibir “una paliza en el piso”, fue llevado esposado a la comisaría sexta, aunque antes fue trasladado a Punta Lara.

“Ahora te doy un tiro en los sesos y te arrojamos al río”, fue una de las amenazas de parte de un efectivo que escuchó el denunciante.

Ya en la seccional policial, el menor contó que fue ingresado a un calabozo donde fue atacado a golpes por unos quince efectivos.

Y afirmó que recibió golpes con su propio cinturón en la espalda.

En su exposición indicó además que “sangrando de un oído y la boca”, luego fue sentado en una silla, esposado, y le colocaron una bolsa en la cabeza para asfixiarlo, mientras era golpeado para que “firme los papeles por resistencia a la autoridad”.

 

 

fuente http://www.eldia.com.ar/edis/20121218/Policias-presos-torturas-comisaria-Tolosa-policiales9.htm