“Un Código Penal que tiene 300 artículos con 900 reformas no tiene coherencia. Ahora hay delitos contra la propiedad que son más graves que la pérdida de la vida. No hay ninguna proporción de la pena con el hecho”. Lo señaló hoy el juez de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Raúl Zaffaroni, que participó de un debate con el director de la Biblioteca Nacional, Horacio González, en el que analizaron los cambios propuestos en el anteproyecto de Código Penal. Zaffaroni agregó, en referencia a las críticas que recibió el texto:“Muchos políticos quieren hacer creer que es más importante lo que venden que lo que hacen. Ese marketing es un error de la política, es consecuencia de la falta de ideas”.

En su exposición, Zaffaroni destacó: «Para sancionar un Código Penal se necesita, ante todo, madurez política. Decir ‘vamos a dejar algo fuera de la lucha de poder y la búsqueda de votos’. No tenemos en Latinoamérica un Código que pueda servir de inspiración. Creo que este texto puede serlo.» Y concluyó: «Sobre este trabajo que hicimos cinco personas que pensamos diferente se podrá discutir, pero ya es cuestión de voluntad política.»

Zaffaroni presidió la comisión ad hoc que elaboró el anteproyecto. Y que estuvo integrada también por el ex ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, León Arslanian; el diputado Federico Pinedo y los ex diputados Ricardo Gil Lavedra y María Elena Barbagelata.

“Debemos eliminar la condena condicional y la libertad condicional. Deben aparecer penas que se cumplan hasta el final”, agregó el ministro de la Corte. Luego hizo un repaso de la «complicada» historia del actual Código Penal. El encuentro fue en el auditorio Jorge Luis Borges de la Biblioteca, que estuvo colmado. Lo escucharon unas 500 personas. Algunas, por la falta de espacio, lo hicieron desde los pasillos.

De la charla también participaron el diputado Leonardo Grosso; el secretario general de la CTA, Hugo Yasky; y Miriam Medina, la madre de Sebastián Bordón, asesinado por la policía en Mendoza, en 1997.González había hecho la introducción al debate y ofició de moderador. “No hay ningún proceso de transformación social que no se plasme en una reforma jurídica. Ponerle obstáculos resulta reaccionario», argumentó.

“Queremos construir un sistema de leyes capaz de acompañar una sociedad que se base en el respeto a la dignidad humana, más allá del color de piel», sostuvo Yasky. Medina señaló: “La historia la construimos entre todos desde el lugar en el que estamos. No queremos una justicia que mire para otro lado y sea solo para privilegiados».

Y Grosso aportó: “Como dice Zaffaroni, el Código Penal resuelve los asuntos de los pobres, y el Código Civil el de los ricos. Eso es lo que queremos cambiar. Pensando en políticas de estado donde todos los partidos pongan su punto de vista». “El objetivo es fomentar el debate”, explicaron desde el Movimiento de Profesionales Evita, que organizaron la actividad.

Un anteproyecto con 200 consultas

La elaboración del anteproyecto fue encargada por la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. Para eso, creó la comisión de especialistas, compuesta por juristas provenientes de distintos ámbitos y que aportan amplitud de opiniones de acuerdo a la representatividad de los variados sectores del arco político. Después de un año y medio de trabajo, la comisión entregó el anteproyecto a la Presidenta el pasado 13 de febrero. Ahora está siendo analizado por el Poder Ejecutivo.

La comisión realizó casi 200 consultas a distintas instituciones, organismos públicos, organizaciones civiles y juristas. Cerca de 70 especialistas, docentes, profesores e investigadores hicieron sus aportes, y 30 universidades e instituciones académicas fueron invitadas a acercar consideraciones. El objetivo de máxima es recomponer toda la legislación penal vigente en un único cuerpo normativo, para otorgarle previsibilidad, transparencia y organicidad a la ley penal.

 

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