Gobierno tomó nota. Sergio Berni reconoció ayer el grave problema de la inseguridad que azota a los habitantes del territorio bonaerense. El funcionario es el segundo de Nilda Garré en el Ministerio de Seguridad de la Nación y su admisión se circunscribió a la provincia de Buenos Aires, en lo que pareció una nueva embestida contra el gobernador Daniel Scioli.

«El área de responsabilidad primaria de este ministerio es la Capital», justificó Berni, pero contradijo así las medidas adoptadas por Garré, que retiró la Policía Federal del subte y de los hospitales porteños. Berni, que reemplazó a su jefa en las apariciones públicas de los últimos días, dijo también: «Más allá de esta inseguridad que está viviendo la provincia, en la Capital tenemos una tasa de robo seguido de muerte que la coloca entre las ciudades más seguras de Sudamérica».

No es lo que opinan los vecinos, como se informa por separado. En la mayoría de los barrios porteños se han realizado marchas en reclamo de la aplicación de medidas contra la inseguridad y ante la falta de respuestas de los gobiernos nacional y porteño decidieron confeccionar sus propios mapas del delito. El funcionario, de profesión médico militar con grado de teniente coronel retirado, fundó esa afirmación en una estadística que reveló ayer en declaraciones radiales y que indicaba que, de los 71 homicidios registrados en lo que va del año en la ciudad de Buenos Aires, sólo cuatro de ellos ocurrieron durante robos.

Sin embargo, según un relevamiento realizado a partir de informaciones publicadas en la prensa en ese mismo período, en la Capital hubo ocho asesinatos en ocasión de asaltos. Las ocho víctimas de homicidios en ocasión de robo fueron el comisario (R) de la Policía Federal, Alejandro Oscar Gómez Echeverría; la jubilada, de 80 años, que falleció de un ataque cardíaco, luego de que dos ladrones vestidos como operarios de una empresa de servicios irrumpieron en su casa de Cuenca al 5100, en Villa Pueyrredón, donde la maniataron y la asaltaron; José Iriarte, el dueño de una agencia de turismo de la zona de Once; un hombre cuya identidad no trascendió, al que mataron en Combate de los Pozos al 1000, en Constitución, y el oficial de la policía Metropolitana, Carlos Escobar, al que mataron para robarle su automóvil en Caballito.

La lista de los asesinatos ocurridos durante asaltos se completa con el fotógrafo francés Laurent Schwebel, asesinado en la plaza San Martín, en Retiro; el cabo de la Policía Federal, Cristian Guillermo Guerrero, quien falleció cuando perseguía a un grupo de ladrones en Villa Lugano, y el joven, de 25 años, cuyo cuerpo fue hallado frente al aeroparque metropolitano el viernes pasado.

OTROS HECHOS TRÁGICOS

En este listado, no se incluyeron otros hechos de violencia igual de graves, como dos homicidios concretados por sicarios en zonas muy transitadas de la Capital.

Tal fueron los casos de un narcotraficante colombiano al que mataron en Marcelo T. de Alvear, entre Talcahuano y Libertad, y de un asaltante de bancos y blindados al que asesinaron en la Plaza de la Misericordia, frente a un colegio religioso, en el barrio de Flores.

Tampoco se incluyeron en la lista, los homicidios de dos hombres, cuyos cuerpos fueron hallados en las adyacencias de Dorrego y Avenida del Libertador, debido a que todavía no fue aclarado el motivo de ambos asesinatos. Ni el caso de Ernesto de Lamadrid, el cabo de la Federal que fue asesinado por un joven al que echaron de un boliche de San Telmo.

En declaraciones difundidas por Radio 10, Berni afirmó: «La baja tasa de homicidios en ocasión de robos hace que la Capital sea una de las ciudades con menor índice en América latina; está muy por debajo de los estándares de Estados Unidos».

«Es bueno que el Gobierno nacional reconozca que la responsabilidad de la seguridad en la ciudad de Buenos Aires es de la Federal, sin embargo seguimos creyendo que debieran pasar la fuerza a la ciudad. Hoy estuve reunido con vecinos en Liniers y estaban muy preocupados porque dicen que se redujo la presencia de la Policía Federal en ese barrio», dijo el vicejefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta a LA NACION.

«Los funcionarios no hablan de aplicar un plan de seguridad serio y a largo plazo. No quieren reconocer que estos números que tiran al aire representan a familias. No les dan valor a vivos ni a los muertos», dijo ayer a LA NACION Vivian Perrone, presidenta de la Asociación Civil Madres del Dolor.

Las afirmaciones del secretario de Seguridad fueron formuladas pese a que hace casi dos años que el Gobierno no difunde las estadísticas oficiales sobre cantidad de delitos registrados en la Capital. La última cifra conocida del índice de homicidios corresponde a 2010. Pasaron siete meses de 2012 y todavía no se conocieron los índices delictivos del año pasado.

Los dichos de Berni también contrastan con las medidas que tomaron habitantes de distintas zonas de la ciudad de Buenos Aires que realizaron cortes de calles en Caballito, Villa Devoto, Recoleta y Liniers para protestar por la falta de seguridad.

LA NACION quiso saber la opinión de la ministra Garré sobre este tema, pero sus voceros no respondieron.

Hace 10 días, Garré había dicho: «En la Argentina, el homicidio, el delito más violento, está muy por debajo de otros países latinoamericanos». Cuando hizo esas declaraciones, ya se conocía el aumento de la cantidad de crímenes en ocasión de robo en la provincia, pero la funcionaria nada dijo sobre el tema que había provocado las marchas de vecinos en Mar del Plata, Necochea, Tandil, Cañuelas, Monte Grande, Lomas de Zamora y Quilmes, entre otros distritos bonaerenses.

 

fuente http://www.lanacion.com.ar/1492512-el-gobierno-dice-que-solo-falta-seguridad-en-la-provincia