El Ministerio de Seguridad provincial se comprometió ayer ante la Justicia a realizar obras y programas de mejora para los presos alojados en dependencias policiales de Rosario, en respuesta a un hábeas corpus presentado por el Servicio Público de la Defensa, a cargo de Gabriel Ganón, donde detalló situaciones de «hacinamiento, mala alimentación y falta de atención en la salud» de los alrededor de 1300 detenidos en reparticiones policiales. El secretario de Seguridad, Matías Drivet, brindó ante la jueza Roxana Bernardelli un detalle de la planificación que tiene la cartera para acondicionar las unidades de detención estableció plazos de entre 45 y 120 días. También prometió programas de salud e iniciar un plan piloto de un mes de para abastecer de nuevas provisiones de alimentos a cinco comisarías.

Hace diez días, en una primera audiencia oral y pública, la Defensoría expuso la situación que relevaron de cada una de las seccionales donde hay presos alojados por falta de vacantes en unidades del Servicio Penitenciario. Ayer fue el turno del Ministerio de Seguridad de entregar un informe sobre las obras necesarias y el tiempo que éstas demandarán. Sin embargo, resta la respuesta a un cuestionario de más de 30 preguntas que la defensoría le solicitó al ministro de Seguridad Raúl Lamberto; como así también se espera que los jueces penales analicen la posibilidad de descomprimir las comisarías.

Drivet hizo un punteo de las obras y mejoras para la convivencia, que están planificadas o en marcha.

El 4 de abril pasado, tras escuchar el planteo de la Defensoría, la jueza Bernardelli ordenó que de manera urgente se realice un control y monitoreo del estado de salud de todos los presos alojados en comisarías y en la Alcaidía. Ayer, Drivet indicó que se firmó un convenio con el Ministerio de Salud para la constitución de un equipo de abordaje sobre los estados de salubridad de los presos.

El funcionario se refirió, además, a los reclamos sobre las malas condiciones de alimentación de los internos y habló de dos sistemas diferentes: mientras que en la Alcaidía la comida es abastecida por el Economato, con un menú fijo; en las comisarías llegan alimentos sin cocción, y eso fue planteado como «un problema» por el propio secretario de Seguridad. Frente a ello, anunció que se contratará un sistema de viandas, para el cual se están pidiendo presupuestos. La idea es que la prueba piloto de dicho sistema comience el 1 de mayo en las seccionales 6, 15 19, 10 y 12.

En cuanto a las obras, Drivet habló de trabajos menores, a realizarse con recursos de la URII, para las que consideró un plazo máximo de 45 días; y otras más complejas, con plazos de trabajo de hasta 120 días.

 

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